Anfibios de Ancares y Courel (Lugo)

Lugares de interés faunístico

Puntos de Interés Observer®

Temáticas científicas



¿Por qué es interesante este Punto de Interés?

Cualquier tipo de humedal es óptimo para encontrar anfibios, especialmente durante su época de reproducción, ya que necesitan el agua para desarrollarse. Sin embargo, los arroyos y las lagunas de montaña son los lugares donde es más fácil encontrarlos. El Pozo de Lago Maior o Lagoa da Lucenza son lugares excepcionales para la observación de especies como la rana de San Antonio o el tritón jaspeado.


  • Para saber más sobre este Punto de Interés pulsa aquí...

  • Imágenes




    Información al viajero

    Comer y dormir

    •   Hoteles
    •   Casas Rurales
    •   Restaurantes
    Para hacer Turismo Científico

    •   APP de rutas
    •   Itinerarios científicos
    •   Guías y catálogos
    •   Guías especializados en Turismo Científico
    •   Sinaléctica
    Perfil de viajeros

    •   Público general
    •   Grupos organizados
    •   Centros educativos
    •   Investigadores científicos
    Actividades destacadas de Turismo Científico

    •   Ciencia Ciudadana
    Investigación científica

    •   Seguimiento de los valores naturales

    Para saber más

    Los anfibios dependen de las masas de agua para completar su ciclo de vida. Durante la etapa larvaria, que se conoce como renacuajo, necesitan agua para desarrollarse hasta que, después de un proceso de metamorfosis, se conviertan en adultos.

    Por lo tanto, es más fácil encontrar anfibios en el interior o en las cercanías de todo tipo de humedales como ríos, arroyos, lagunas o lagos, especialmente durante su época de reproducción, donde este tipo de áreas son esenciales para ellos. Los adultos a menudo son nocturnos, por lo que será en este momento cuando su observación sea más sencilla. Sin embargo, también se pueden observar durante el día, especialmente en las épocas más húmedas del año.

    Para la observación
    En la laguna de Lucenza destaca la presencia de la rana de San Antonio (Hyla molleri) donde presenta altas densidades. Esta especie pertenece a una familia de batracios  típicamente arborícolas, los hílidos, donde desarrollan gran parte de su vida. Habitualmente trepan por árboles y matorrales para ubicarse en áreas cálidas y protegidas, donde pueden hacer sus ruidosos cantos para atraer a las hembras. Esta especie está acompañada por dos anfibios más en la laguna, el tritón jaspeado (Triturus marmoratus) y el tritón palmeado (Lissotriton helveticus).

    Hay pocas especies que se pueden ver en esta zona húmeda del Courel donde, por el contrario, hay muy buenas poblaciones de reptiles, probablemente debido a las elevadas pendientes de la zona, a las altas temperaturas estivales y la presencia de sustrato geológico calizo, que provoca que las zonas húmedas escaseen.

    En los Ancares, sin embargo, es muy común poder observar anfibios, especialmente la rana bermeja (Rana temporaria). Es una especie típica de ambientes fríos y húmedos y se puede ver en los turberas y lagunas de montaña de la sierra, y en las partes más bajas de las montañas de Lugo, prados y robledal húmedo. Por el contrario, no está presente en las zonas más cálidas y secas, como el valle del río Sil o la Serra do Courel.

    Otra especie de rana parda, que se distingue de la rana bermeja porque tiene patas traseras muy largas, y el vientre muy pigmentado es la rana patilarga (Rana iberica). Como indica su nombre en gallego, “ra dos regos”, vive en los arroyos y ríos de estas montañas, donde es muy abundante y fácil de observar.

    Curiosidades
    La mayoría de las lagunas de estas montañas se secan durante el verano, como en el caso del Pozo do Lago Maior. Sin embargo, esto no hace que estén sin vida, sino que las especies tienen que adaptarse a estas condiciones. En el caso de las larvas de anfibios, adaptan su actividad, y si el estanque se seca rápidamente, la metamorfosis se produce de manera rápida para permitir que las crías abandonen el agua antes de que desaparezca por completo, de modo que pueda sobrevivir, ya que las larvas no son capaces de vivir fuera del agua.

    En el caso de las libélulas, específicamente el “lavacú azafrán” (Sympetrum flaveolum), los machos y las hembras se unen durante la copulación en el llamado tándem. Después de la reproducción, las hembras ponen huevos en barro húmedo, agarradas por los machos para evitar que otros se reproduzcan con ellas y así asegurándose de que toda la descendencia de la hembra sea suya. Al llegar las primeras lluvias otoñales, las larvas dejan los huevos que las protegieron durante la época de sequía.

    ¿Donde encontrar anfibios?
    En cualquier tipo de humedal podemos ver anfibios. Sin embargo, los arroyos y las lagunas de montaña son los lugares donde es más fácil encontrarlos. El Pozo de Lago Maior, ubicado cerca de Hospital de la Condesa, Pedrafita do Cebreiro o Lagoa da Lucenza, cerca de Seara, Quiroga, son lugares excepcionales para su observación. La mejor época para la observación de anfibios son los días, y especialmente noches, húmedos y no excesivamente fríos, en los que los adultos salen de sus escondites.

    Bibliografía asociada

    Debemos tener en cuenta una obra de gran interés para conocer las diferentes especies de anfibios y reptiles que habitan el territorio gallego:

    •  Galán, P. & Fernández-Arias, G. 1993. Anfibios e réptiles de Galicia. Edicións Xerais de Galicia.

    Aún más actual, y de un alcance geográfico más amplio, destaca un trabajo imprescindible para conocer a los anfibios y reptiles europeos:

    •  Speybroeck, J.; Beukema, W.; Bok, B., Van Der Voort, J. & Velikov, I. 2016. Field guide to the amphibians and reptiles of Britain and Europe. Bloosbury.

    ¿Tienes alguna duda?

    Contacta con nuestro departamento de atención al cliente para cualquier pregunta sobre Observer

    Contactar

    Iniciar sesión

    ¿Has olvidado tu contraseña?