Nacimiento del Río Eo (Lugo)

Galicia es el país de los mil ríos, y uno de los más emblemáticos es precisamente el río Eo. Casi cien kilómetros de curso de agua desde el nacimiento hasta la desembocadura delimitan la transición entre Galicia y Asturias. Sus aguas fluyen por los condados gallegos de Baleira, Ribeira de Piquín, A Fonsagrada, A Pontenova, Trabada, Ribadeo y el asturiano San Tirso de Abres y Vegadeo.

El río Eo nace en Fonteo como un cauce que reúne las aguas de la Serra do Mirador. La composición de esta cadena montañosa incluye rocas metamórficas tales como esquistos y cuarcitas, que en enclaves localizados intercalan calizas.

Todas estas litografías datan de la época del Cámbrico, la primera de las épocas de la era Paleozoica. Estos materiales se depositaron en una plataforma marina poco profunda, durante un período de tiempo en el que se elevó el nivel del mar, de modo que los sedimentos más modernos se enterraron en áreas cada vez más profundas. Fue en ese proceso cuando se deposita la llamada cuarcita de Candana, predominante en este punto, que es una formación de tipo detrítica, es decir, compuesta de fragmentos, o clastos, de roca y minerales previamente acumulados mecánicamente.

Después de la etapa de deposición, entra en juego la fase de deformación tectónica que se produjo en dos momentos geológicos diferentes. Primero hubo una deformación en la Orogenia Varisca que transformó la cuenca sedimentaria primitiva en un área de relieve emergente. Más tarde, ya en la era Cenozoica, la Orogenia Alpina reactivó las antiguas tierras de variscos erosionadas con el tiempo, levantando la orografía existente.

Este nuevo movimiento orogénico trae consigo una nueva red de fracturamiento en la dirección de N-S, que resulta en la alineación de las montañas y el encajonamiento de cursos de agua siguiendo esa dirección. La cordillera del Mirador es un ejemplo de levantamiento y reorientación del suelo como resultado de la fractura tectónica alpina producida por la prolongación del eje cántabro-pirenaico.

Para la observación
La ubicación exacta del nacimiento del río Eo se inserta en un complejo lúdico e informativo llamado "Área recreativa del nacimiento del río Eo". Este complejo ambiental, a pie de carretera, incluye el naciente en sí y un Centro de Interpretación Ambiental, así como algunos elementos de la etnografía popular, como un horno o un hórreo recientemente rehabilitados. La mayor parte del espacio fue construido utilizando materiales autóctonos. Este punto del Ayuntamiento de Baleira tiene un gran interés didáctico gracias a una exposición permanente en el río Eo y sus trazos fundamentales de la Serra da Marronda. Esta cordillera contiene un bosque autóctono de 611 hectáreas de naturaleza pura, con una altitud de entre 450 y 925 m con especies arbóreas como hayas, castaños, robles, avellanos, acebos, sauces o espinos.

Curiosidades
El nombre del río Eo proviene de la palabra Ego, que en la época romana se alternaba con Egoba, y también lo es el testimonio del naturalista y militar romano Plinio el Viejo al hablar de los Egobarri, los habitantes de la rivera del río. De Ego proviene Eo y también las formas medievales Iuve (775), Euve (875), y finalmente Ove (905), nombre de una parroquia de Ribadeo, próxima a la ría.