Reptiles (Lugo)

Los reptiles son un grupo de vertebrados que habitualmente necesitan de temperaturas elevadas, sobre todo durante el verano, ya que durante el invierno tienen la capacidad de reducir su actividad e hibernar para reducir el gasto de energía durante el tiempo que el sol calienta menos. Son animales ectotermos, es decir, que precisan del calor externo para poder mantenerse con vida, teniendo que solearse para poder conseguir la temperatura necesaria para sobrevivir. A cuyo objeto, es habitual observarlos en zonas cálidas, habitualmente próximas a muros o canteras, donde pueden obtener más temperatura.

No obstante, algunas especies pueden sobrevivir en zonas más frías, debido a que requieren una menor temperatura para mantenerse activos. En las partes altas de las sierras del este de la provincia de Lugo sobreviven algunas de estas especies de ambientes frescos, y que tienen en estas zonas su límite de distribución mundial.

Para la observación

Podemos ver la lagarta das brañas (Zootoca vivipara), en los herbazales de los alrededores de la Turbera del Pico Mustallar, aunque también se puede encontrar en las pequeñas brañas y zonas húmedas que acompañan el arroyo de Vega Cimeira, el principal curso fluvial del valle. Si bien, la mayoría de las lagartijas gustan del sol y calor, en el caso de la lagarta das brañas, esta condición no siempre se da, ya que es frecuente observarla en días cubiertos e incluso con lluvia, y escondiéndose en los días más calientes del verano. Es la especie de reptil de mayor área de distribución mundial.

Otra especie típica de zonas frescas es la víbora de Seoane (Vipera seoanei) también llamada víbora cantábrica debido a que es una especie endémica del noroeste ibérico, que llega por la costa cantábrica hasta el País Vasco francés, donde es muy escasa y localizada. Su veneno es el de menor toxicidad dentro de las víboras ibéricas, por lo que su peligrosidad es baja, aun así, por precaución debemos evitar su manipulación o acercarnos a ella demasiado al observarla o hacer fotografías. Frecuentemente habita zonas de monte húmedas, en especial aquellas que presentan un buen estado de conservación. En los montes de las aldeas de Liñares, O Cebreiro y en O Incio suelen observarse ejemplares con relativa facilidad prestando atención. En la sierra de Ancares destaca la elevada frecuencia de ejemplares completamente negros, llamados melánicos que, si bien, tienen una menor capacidad para pasar desapercibidos ante sus depredadores, son más hábiles en aprovechar el calor del sol para regular su temperatura corporal. 

En las paredes marmóreas de la iglesia de San Pedro Fiz, en el Ayuntamiento de O Incio, y en los muros que la rodean, podemos ver la lagarta da serra (Iberolacerta monticola), endemismo cantábrico que muestra su mayor densidad en zonas frescas y húmedas de Galicia. Pese a ser un lagarto, precisa de una cierta humedad ambiental y también calor, lo que hace que su distribución esté relegada a las zonas más montañosas de la Cordillera Cantábrica.

En el valle del río Navia, concretamente en el ayuntamiento de Negueira de Muñiz, destaca la presencia de especies típicamente mediterráneas, muy lejos de su área de distribución habitual, mucho más al sur. Reptiles de zonas térmicas como la culebra bastarda (Malpolon monspessulanus), la culebra de escalera (Zamenis scalaris) o la lagartija lusitana (Podarcis guararramae), son frecuentes en esta zona. Las poblaciones más próximas a estas especies se sitúan mucho más al sur, concretamente en las zonas cálidas de la sierra del Courel. El valle del río Navia presenta características de temperatura y precipitaciones perfectas para que estas especies puedan estar presentes en la zona.

[PARA DESCARGAR] GUÍA DE TURISMO CIENTÍFICO: Rutas de la Ciencia en las Montañas de Ancares y Courel en http://turismo.deputacionlugo.gal/gl/turismo_cientifico/itinerarios