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¿Por qué es interesante este Punto de Interés?
Si hay una flor ornamental emblema de Galicia, esa es la Camelia. No hay jardín o parque que no tenga al menos una de las muchas variedades que esta flor presenta. Es un género botánico originario del sudeste asiático que tiene casi 300 especies distintas, con diferentes formas, tamaños y colores. Areeiro cuenta con una colección de más de 80 especies de las cuales se puede ver una buena representación en este jardín, junto con otro tipo de árboles tanto ornamentales como frutales.
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Para saber más
La popularidad de la Camelia en Galicia se remonta a los años 50 y 60 del siglo pasado cuando comienza a generalizarse su uso en jardines, tanto públicos como privados. Sin embargo Areeiro ha estudiado varios ejemplares en diferentes pazos que tienen edades de más de 200 años, lo que convierte la presencia de la Camelia en esta parte del país en histórica. En el momento de su llegada, al ser una planta exótica y por tanto muy cara, sólo las clases nobles tenían acceso a ella, razón por la que ahora encontramos los ejemplares más antiguos en los pazos y casas señoriales gallegos.
En general son plantas arbustivas, que en algunas especies pueden alcanzar porte arbóreo de más 10 metros de altura. Las flores, en su forma silvestre, tienen de 5 a 9 pétalos con colores que van del blanco al rosa o rojo. Contrastan con esos colores los estambres, de un amarillo casi dorado y en mucha cantidad. Sus hojas, siempre verdes, son algo coriáceas siendo esta una adaptación a climas muy húmedos y lluviosos.
El cultivo ornamental de Camelias ha dado como fruto una gran variedad de flores que son complejas de clasificar, ya que año a año se consigue crear mediante cruces formas y colores nunca vistos. En general se pueden resumir en los siguientes tipos:
Simples: Con una hilera de 5 a 7 pétalos, rodeando un círculo central de estambres.
Semidobles: Con dos o más filas de pétalos, siempre en número de 8 o más, rodeando a los estambres.
Anémona: Con un centro globular formado por estambres y petaloides, rodeado por una o más filas de pétalos.
Peonía: Toda la flor presenta un aspecto globoso con pétalos irregulares, estambres y petaloides entremezclados.
Con forma de rosa: Con muchos pétalos ordenados, que permiten ver los estambres cuando la flor se abre.
Doble formal: Con numerosos pétalos ordenados, imbricados, sin estambres y con estilo rudimentario. Nunca forman fruto, ya que no pueden ser polinizadas.
En este jardín, así como por otras partes de la finca, se pueden observar algunas de las especies más comunes como Camellia japonica, una de la que más variedades tiene como planta ornamental, Camellia sasanqua o la Camellia reticulata.