Lago das Pontes de García Rodríguez (A Coruña)

La clausura de la mina dejó tras de sí una cicatriz en el paisaje, un agujero de dimensiones enormes, de 200 metros de profundidad y 865 héctareas de superficie, que fue renaturalizado en el hermoso lago de 18 km de perímetro, que hoy podemos disfrutar.

La zona noroccidental, declarada reserva ornitológica, cuenta con un observatorio de aves hasta el que podremos llegar en bici o a pie, a través de la “Senda de la Memoria” . Este lugar, refugio para las más de 100 especies de aves que acoge, y que encuentran en él un lugar de paso y de cobijo, cuenta con dos islas artificiales que favorecen la implantación de flora y fauna. Ubicado en uno de los islotes, y con el objetivo de rendir homenaje a los hombres y mujeres que durante décadas trabajaron en la mina, se puede distinguir un monumento, símbolo de su lucha y legado.

Esta guía de viaje, descargable, está planteada para que el visitante, sin conocimientos previos de ornitología,  pueda disfrutar de este espacio natural y conocer la gran diversidad de aves que lo habitan en cada estación del año. Observaremos las danzas de cortejo con sus exhuberantes plumajes en primavera y la llegada de las aves migratorias, con su variedad cantos, en verano. En otoño,  con la caída de las hojas, descubriremos la marcha de las primeras especies hacia zonas más cálidas. Ya en invierno, disfrutaremos del silencio del lago, cuando solo quedan en él las especies residentes que buscan refugio y alimento en sus aguas cristalinas.

El lago de As Pontes es en la actualidad, no solo un espacio natural, sino el símbolo ecológico de un pasado industrial y social que ya forma parte de la historia reciente de Galicia. Pasado y presente de un mismo lugar, historia y naturaleza vivas.

Y para disfrute de los más aficionados, muchas, muchas aves!